Precioso violín francés del siglo XVIII, atribuido a la escuela de Louis Guersan, uno de los más destacados lutieres del París barroco. Fabricado hacia 1750, este instrumento representa la elegancia y maestría de la tradición parisina, con una construcción sobria y refinada, propia del estilo «Viejo París». Su sonoridad es cálida, noble y expresiva, con gran profundidad y respuesta dinámica, ideal para intérpretes que buscan un instrumento con historia, carácter y una voz propia.